Dos independentistas fueron llevados a la comisaría de la policía nacional española, el jueves 3 por la mañana, para ser interrogados sobre su militancia política en organizaciones del movimiento independentista asturiano. Parece que ser independentista es ser sospechoso.
Agentes de la Brigada de Información de la policía española se presentaron en casa de dos jóvenes independentistas asturianos. El 4 de septiembre por la mañana fueron interrogados en dependencias policiales por los agentes sin razón objetiva ni acusación alguna . El objetivo del interrogatorio era conseguir información sobre distintos proyectos políticos y dejar claro que "cuando salgan de casa van a estar vigilados".
Los dos independentistas fueron interrogados horas sobre su vinculación personal con el movimiento independentista y sobre las organizaciones, sobremanera sobre los colectivos juveniles, "acusándolos" de ser "capos" del independentismo y muestrándoles fotos suyas participando en manifestaciones legales, como la manifestación en solidaridad con los sindicalistas Cándido y Morala, ente otras.
Los dos jóvenes fueron puestos en libertad tras un largo interrogatorio sobre la militancia y la ideología política de los independentistas y no sin dejarles claro que tuviesen "cuidado" porque iban a "estar vigilados".
Los interrogatorios a jóvenes independentistas y antifascistas está siendo algo frecuente en los últimos tiempos, sobre todo, en los territorios dependientes de la brigada de información de Xixón. Los dispositivos policiales orientados al control y acoso a la juventud independentista son cada vez mayores y dejan serias dudas sobre el renombrado "estado de derecho" e interrogantes serios sobre derechos tán básicos como la libertad de pensamiento.
(Traducción del asturiano al castellano de un artículo de Glayíu, portal de contrainformación de Asturies)
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